Aprovechando que un amigo estaba por Pirineos de vacaciones hemos podido acercarnos por allí y hacer un par de vías que tenía en mente. Además, viendo la previsión de tormentas (es que no me gusta que me parta un rayo) era mejor hacer vías sin mucho compromiso y bastante disfrutonas.
Primero fuimos a hacer la "Julián Vicente" (también conocida como "Diedro de la Hoz"). La vía está situada en una pared que hay bajo el pueblo de Hoz de Jaca y sobre el embalse de Bubal.
Le da la sombra toda la mañana así que en esta época de calores veraniegos es bastante agradecida de hacer.
El acceso se hace desde el mirador que hay sobre el embalse, por un senderillo que está equipado con cuerdas fijas, más que nada para no partirse uno la crisma en caso de resbalón.
Acceso a la vía
Esta vía es como el mundo al revés, un poco como hacer espeleo, ya que primero rapelas la pared y luego la subes. Lo cual es una buena ventaja ya que según vas bajando puedes ir viendo la pinta que tiene la vía que vas a hacer y las dificultades que te vas a encontrar.
Con cuerdas de 60 m se hace un gran rapel de unos 50 m, hasta debajo de un techito que queda a mano izquierda según se baja. Es muy recomendable esta opción. Ya que las dos cordadas que bajaron detrás de nosotros se les ocurrió rapelar desde un árbol que hay en una repisa. Y rapelar desde ahí supone que puedes tirar piedras (de hecho cayó una señora piedra de unos 4 kg al lado de mi compañero) no solo a los que están debajo sino que cuando recuperes las cuerdas puedes tirarte piedras encima. Afortunadamente la piedra no le cayó encima ya que si le llega a caer me temo que hubiera tenido como compañero de escalada a "papa pitufo".
Primer rapel
La vía es muy disfrutona, muy vertical con bastante canto y completamente equipada (mejor incluso que muchas vías de deportiva). De todas formas no deja de ser una vía de pared, y hay que guiar bien la cuerda para que no roce mucho y tener cuidado con algún bloque medio suelto.
El primer largo me pareció el más sencillo, solo un paso en el que el diedro desploma un poco hace que tengas que esforzarte en buscar los agarres.
En elpasochungo del primer largo
En este caso, todo lo que baja sube :)
El segundo largo sí que tiene un paso de placa bastante fino, pero muy bien protegido. Y algún desplome llegando a la reunión.
Segundo largo, algún pasito desplomado
Llegando a la segunda reunión
El tercero me encantó, todo un diedro ligeramente desplomado pero con mucho canto donde disfrutar como un enano sin muchas preocupaciones.
Magnífico diedro del tercer largo
Pasos desplomados en el diedro del tercer largo
Llegando a la tercera reunión
El último largo empieza con unos metros de bavaresa, luego una travesía en placa debajo del techo y finalmente una chimenea medio desplomada para llegar al final de la vía y punto donde hicimos el primer rapel.
En la travesía bajo el techo del final
En la chimenea final
He hecho un croquis (un poco cutrecillo) que espero que le sirva a alguien para animarse a hacer esta estupenda vía.
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Después del buen sabor de boca que nos dejó la vía, pasamos la tarde escalando con los niños (y el perrete...).
La ocasión era magnífica para que Roque aprendiera a jugar y estar con los niños. Y la verdad es que se portó muy bien, al principio jugaba con mucha alegría con los niños, luego poco a poco, jugaba con paciencia, y al final, el pobre tenía una cara que parecía querer decir: ¡Señor, llévame pronto!
Pero claro como se puede ver en las imágenes mis amigos no es que sean precisamente de vallecas, así que había ciertos problemas idiomáticos con el perrete.
Al día siguiente, como el Diedro Sajuma nos daba un poco de respeto, la prudencia nos hizo ir a hacer la Vía Capricornio en la Pared de Forronías, cerca de Panticosa.
Para darle algo más de emoción a la vía, decidimos no hacer el primer largo de la Capricornio (IV+) y entrar por la vía Mano Negra (6a). De esta forma, hicimos un primer largo de unos 45m y 6a, que está perfectamente equipado con parabolts y que es una preciosa placa de pequeños agarres que tiene su máxima dificultad en las dos primeras chapas.
Empezando la vía Mano Negra
Luego seguimos por la vía Capricornio. Si bien la vía me daba cierta pereza porque desde abajo parece tumbada y con vegetación. La verdad es que luego es mucho más interesante de lo que parece. El segundo largo, creo recordar que solo tiene un par de chapas. Así que el resto hay que protegerlo con friends. Es solo de V, pero en medio del largo hay un pequeño desplome que hay que proteger con un par de cacharros por lo menos, y te hace recordar que no estás en un tumbarral y que hay que andarse con cuidado.
Segundo largo de la Capricornio, tras pasar el techito que hay que equipar.
El tercer largo tiene su paso más "curioso" en una especie de minichimenea algo desplomada, de esas que parece muy fácil y que luego te hace sentir ridículo de lo difícil que te resulta como no te coloques bien. El paso está bien protegido y además se puede completar la protección con algún friend pequeñito o algún alien.
Iniciando el tercer largo
Saliendo de la indigna chimenea
Del último largo no tengo fotos desde abajo, así que he cogido una del blog de Pablo Velasco (Por cierto, muy recomendable) para que os hagáis una idea de como es.
Ultimo largo, foto de www.pablovelasco.com
Es un largo corto pero muy bonito. Primero un diedro desplomado de 6a (tiene un parabolt y es recomendable poner un friend mediano para no caer a la placa de abajo).
Luego para llegar a la reunión hay que ir por donde más miedo da, es decir por el filo del techo que domina toda la pared. Es más de miedo que de dificultad, eso sí, la última chapa queda lejos de la reunión y si no se va sobrado supongo que será mejor poner algo de protección adicional (no me fijé pero supongo que algún alien entraría en las pequeñas fisuras que hay).
Saliendo del ultimo largo a la reunión
Para bajar, se puede hacer por la vía en tres rápeles o salir por un sendero marcado en amarillo (ojito a los bloques que hay sobre la reunión que podrían llegar a caer incluso sobre la carretera).
Primer rapel
La pared vista desde la última reunión.
Por cierto, en el último rapel y sobre todo si hace mucho viento, hay que tener mucho cuidado al lanzar las cuerdas ya que la línea de alta tensión está bastante próxima a la pared.
Último rapel.
Aquí, mi amigo Bart encantado con la actividad del fin de semana.
Y mi cutre croquis de la actividad que hicimos :)
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